viernes, 14 de agosto de 2009

recuerdos recurrentes

quiero escribir, realmente quiero, las palabras se anidan junto a la canción que me mueve ahorita el corazón, la esencia del verdadero amor se encierran en ese vídeo y yo sigo golpeando los muros de cristal de mi existencia, esperando por ver a alguien entre la eterna bruma que me rodea.

pasan los días después de la torturante operación, fue una semana un asco, donde me ahogaba con todo y sentía el sabor de la sangre a cada momento, la asfixia constante y no poder dormir, hicieron de esa semana algo eterno, rogando porque llegara el día en que pudiera volver a respirar, aunque fuera un poco.
siguen pasando los días, sin descanzo, pero extrañamente quede suspendido en el tiempo, estoico en el espacio, mientras en mi cabeza y mi corazón se agolpan recuerdos de amor, deseos de hacerlo y algo de nostalgia y envidia de aquellos que si aman, y yo no.

me siento estancado, los nuevos conocimientos y pensamiento...no me llegan, acumulo información diariamente pero sin un propósito claro, mi meta, ahí esta, me mantiene vivo claro esta, pero por el momento el fuego que hay en mi interior lo sofoca algo, y no se que es, me siento vacío.
no es una tristeza constante, es una melancolía, supongo que todo me aburre constantemente, y ya no se que hacer, no se si tenga que ver con todos los cuidados a los que me veo sometido gracias a la operación, pero mi fuerza esta mermada, y un constante fastidio me aflige, habitualmente cuando camino por ahí o aun, cuando escribo acá en el computador, mi mente se va, se eleva y crea en el instantes de amor, y mi corazón se hincha de satisfacción, de reconocimiento por todas esas visiones locas que me rodean en ese instante, y es que solo puedo pensar en ello.

solo puedo pensar, que entre toda esa multitud de rostros indiferentes, entre las brumas que me rodean, aparece alguien al otro lado del cristal, solo puedo imaginarme eso, la comprension, la comprenetración. el entendimiento de nuestras alamas no gemelas pero si complementarias, almas que necesariamente tienen que estar juntas, ese amor absurdo y sin sentido pero enorme y fuerte, no hay otra forma de decirlo, el estar juntos de las manos, gritando al cielo, rompiendo los muros erigidos con antelación, quiero amar, y sentirme amado, amando tan profundamente que tiemble mi interior, sentir la alegría mas grande por ver a esa persona, sentir deseos de verla, volver a hacer mis planes macabros y super cursis de antaño, recuperar parte de mi sonrisa, que esta persona barra con este estancamiento en el que estoy, que se lleve lejos mi aburrimiento, que tome mi mano y subamos juntos aun lugar alto y gritemos a las nubes que nos amamos, que nos abracemos en frente de un atardecer eterno.

ven¡¡¡ maldita sea, esos pensamientos me llenan en cualquier momento, mis ojos desenfocados que miran al horizonte, la gente se da cuenta, que aunque mi cuerpo este ahí mi mente vaga entre marismas, ya no se que hacer ya no se que pensar, ya no se ocumo disimularlo mas, porque cada día que pasa la vacuidad se lleva poco y mas de mis pensamientos y recuerdos, cayendo en un pozo en mi pecho, recordando sin recordar y deseando sin buscar aquello que anhelo pero no me llega, porque estoy cansado de buscar y equivocarme, estoy cansado de las oportunidades y estoy mas que cansado de negarme, estoy cansado de dar vueltas con una venda en mis ojos, y quisiera coger a golpes ese muro de cristal pero ya me duelen las manos de tantas heridas inciertas, que a punta de golpes recibí como agradecimiento.

me piden que resista, pero he resistido demasiado, y me siento como si fuera de cristal mellado, un fino golpe me reventaría en mil pedazos, mil fragmentos de mi, pero todos totalmente diferentes, mil piezas de la misma figura, un rompecabezas extraño que nadie quiere armar, y sigue y sigue el pensamiento estúpido y recurrente: maldito amor..

maldita obceción con el amor...

por el momento me iré tocar violín, deje un mensaje en la pared, ¿podrías verlo?
creo que no importa, no soy del tipo de personas que dura tres meses diciendo mentiras, ¿no?, eso es lo bueno y malo demi, que soy sincero y mas cuendo me lo preguntan.

domingo, 9 de agosto de 2009

mientras acercaba a mi cara la mascara de oxigeno, saturada de anestecia, la anestesiologa, con su hermoso perlo dorado, acariciaba mi rostro, su expresion era de infinita dulzura, como si fuera incapaz de hacerme daño, igual entendi de un modo extraño que debia hacer, entregarme a esa sensacion inmensa de sueño, un sueño tan increiblemente pesado, que borro mi conciencia, todo mi entorno.

dulces sueños...-murmuro, acariciando mi mejilla, todo se volvio oscuro.

...

ruido, a mi alrededor se escucha ruido, percibo pasos, pero mis sentidos estan embotados completamente, una parte de mente intenta comprender que pasa a mi alrededor, la otra parte, verifica cada parte de mi cuerpo, no abro los ojos, no me muevo, se que si me da por moverme estare mareado durante un tiempo, asi que prefiero mantenerme quieto durante un rato, hasta que tenga pleno control de mi mismo.

las ganas de vomitar son intensas, siento el cuerpo algo pesado, tengo la cabeza por decirlo asi, nebulosa, como si unas nubes grises y negras se pegaran a mi ojos impidiendome ver o razonar con claridad.

abro los ojos, estoy en una camilla, con una cobija encima, mi cuerpo ya puede moverse, pero aun asi me siento infinitamente cansado y debil, es un asco, parpadeo furiosamente tratando de despejar mis ojos, funciona, pero aun asi...
me ahogo...
me ahogo...

demonios, tengo que respirar por la boca, es un asco, me confundo bastantes veces antes de hacerlo con naturalidad, ya mas calmado, ya cuando el oxigeno llega a mi cerebro, respondo con mas velocidad, ami derecha hay otra camilla. vacia, al frente una puerta doble de esas de hospital, imediatamente despues, a la derecha hay una larga mesa donde entran y salen enfermeras, alzo la mano, para llamar la atencion de una de ellas, intento hablar, sale un murmullo casi incomprensible, se acerca, me trae un par de toallitas de papel, o de gasa, no se, de esas de hospital, me pregunto porque, ah ya, un hilo de sangre se resbala por mi mejilla, asi que me apresuro a limpiarlo, pero parece ser eterno, asi que me toca andar con ese papel, pegado a mi rostro.

la enfermera se va, pero comienzan las arcadas, el sabor de la sangre llena mi lengua, alzo las manos desesperado y la enfemera se da cuenta, con un gesto de fastidio deja caer frente ami un cuenco de metal, parece una taza de esas donde mi perro come, y no me peudo controlar mas, un hilillo de sangre recorria ya mi menton, y vomito.
un asco.
vomito y vomito sangre, solo sangre, roja y fuerte, sale de mi, llena esa porqueria, y la enfermera se la lleva al minuto.
luego trae mi ropa, y me dice que me vista, me ayuda con la camisa, y la chaqueta, pero para la ropa interior trae un biombo, y yo con mis manos tremulas apenas si puedo pararme, cuando todo la camilla para izarme un dolor absurdo recorre mis manos, claro, en busqueda de mis dichosas venas, me agujerearon mis manos de un modo horrible, asi que hay par de gasas sujetadas a mis manos, ouch, tonto error.
me logro poner de pie. me pongo la ropa interior, pero al intentar alcanzar el pantalon, se me van las luces, y caigo en la silla de ruedas, que mierda, la enfermera llega y sin mas miramientos me viste.

luego mi madre, y por fin puedo salir de ahi, estamos en el carro de felipe, un amigo de mi madre, que conduce como un loco por la calle para ir hacia mi casa, las diferentes vueltas y saltos de las tan pavimentadas calles de mi ciudad no hacen mas que marearme, asi que digo:
- mamá.... estoy mareado....creo que voya vomitar...
me mira coge mi mano y me pide que me calme que ya vamos a llegar, miro por la ventana y aunque mi mundo de vueltas alcanoa percibir que vamos por la novena, asi que loq ue falta es camino, pero me contengo y me controlo, y aguanto hasta llegar a casa.

me hecho en la primera silla que encuentro, respirando pro la boca trabajosamente, todo tda vueltas y siento el sabo de la sangre en mi lengua, alcnazo a avisar ami mama, que trae